Este amigo, al que he bautizado como ´BICHIN´ esta siempre conmigo, en los momentos buenos y en los no tan buenos, comparte conmigo experiencias emocionales y físicas cada vez que se manifiesta, me acompaña en mi día día, influye en mis relaciones sociales, incluso duerme conmigo, es más decide cuando puedo dormir y cuando no, de verdad es mi amigo más fiel, comparte todos los aspectos de mi vida.
Odio las estadísticas, las generalidades, pero debo reconocer que cumplen su función, dicen que en España 6.10 millones de personas sufren dolor crónico. También según estos datos las mujeres nos llevamos la palma ya que representamos el 51.53 de los datos, en cuento a tipo de dolor, el más frecuente es el de espalda, seguido del dolor articular, el dolor de cabeza y el dolor cervical.
– Merskey y Bogduk 1994 describio el dolor como una experiencia desagradable sensitiva y emocional asociada a un daño real o potencial de los tejidos o descrita en términos de mucho daño.
La respuesta dolorosa producida por estímulos nocivos es un mecanismo protector fisiológico clave que advierte de una lesión tisular inminente, e incluye reflejos motores y autónomos, además de la sensación desagradable que llamamos dolor – Woolf. C 2007
El dolor es una respuesta cerebral desagradable, proyectada sobre el cuerpo virtual, en base a toda la información disponible cuando considera que existe amenaza, y que implica una acción – Lorimer Moseley
Si en algo coinciden los diferentes autores, es en que el dolor es desagradable, podríamos decir que si el componente afectivo es positivo, no lo consideraríamos dolor. También tenemos que quedarnos con que el dolor es una respuesta cerebral que se proyecta en base a toda la información disponible cuando considera que existe amenaza, toda esta información puede ser tanto sensitiva, un capón que te mete tu padre cuando te portas mal (Estimulo nociceptivo sobre los tejidos), como experiencias emocionales asociadas a ese daño.
El cerebro lo procesará todo y emitirá una respuesta dolorosa en función de múltiples factores, si amigos, el dolor se fabrica en el cerebro al 100%, y este usará todos los ingredientes que hemos mencionado anteriormente para cocinarnos un buen dolor sordo, punzante o suave.
Por lo tanto el dolor funciona como un mecanismo de aviso o de alerta ante una amenaza a la que debemos dar respuesta. Bueno…leyendo esto último no parece tan malo, de hecho es un mecanismo completamente necesario para el ser humano.
Cuando “BICHIN” se pone en acción debo prepararme para una antentica batalla con todas las armas a mi alcance.. “Bichín tiene acceso a todas las áreas de mi vida, la afectiva, la cognitiva, la conductual y la social. Se empeña en generar emociones negativas, ansiedad, estrés, insomnio, influye en nuestras relaciones con mis amigos y familia, hoy me he enfadado con Lisa y he mandado a la porra a un político (mal hecho, pero imposible controlar la incisión, la constancia, con la que BICHIN ataca) y por supuesto genera mal humor…etc.
Ante una situación de máxima actuación de BICHIN, lo mejor es apagar el teléfono, bajar las personas y desaparecer del mundo hasta que frene la intensidad del bombardeo, hacerme caso, esto es un buen consejo si no quieres arrepentirte de tus acciones en situación de crisis.
Por todo esto debemos abordar el dolor crónico desde esta perspectiva y no como el dolor de una simple estructura corporal.
Aún así, la gestión emocional es importantísima en la lucha contra BICHIN, comenzamos, “Nunca podré volver a ser la que era”. “El dolor constante me tiene abrumada”. “Estoy enfadada, no quiero pensar que a partir de ahora esta sea mi nueva condición, aguantar constantemente este dolor”. “En menos de un año, las cosas que antes hacía ya no puedo hacerlas, me siento inútil” …
Este tipo de frases son las que suelo verbalizar cuando el dolor crónico es insoportable, porque soy una persona activa, con muchas ganar de hacer cosas, y no soporta la incapacidad sobre todo física a la que me somete BICHIN, hasta el punto de dejarme postrada en un sillón durante días, alguna vez semanas, siendo una persona totalmente dependiente de amigos y familia.
Porque, la realidad es que el dolor es una de las peores condiciones a las que se tiene que enfrentar una persona. Y cuando aparece en la vida de cada uno de nosotros, hay que aprender a convivir con un nuevo compañero de viaje que se presenta sin ser invitado.
Mi experiencia con el dolor mejoró desde el momento en que decidí aprender a gestionar el dolor, aunque os sorprenda el punto más importante es la aceptación. Entender que es una situación que no se puede cambiar ni evitar.
Algunas de las herramientas ante las que “BICHIN” ha claudicado son: Respiración y relajación, Mindfulness, Reestructuración cognitiva. Gestión emocional para favorecer la aceptación y el manejo de las emociones asociadas al dolor crónico.
Gestion en la solución de problemas y limitaciones a las que me somete BICHIN.
Manejo de la atención y enfoque en los valores y objetivos. Puesto que la atención está implicada en la percepción del dolor, el objetivo de estas técnicas está orientado a redireccionar la atención del paciente hacia otro foco que no sea el propio dolor. Para que, poco a poco, vaya aprendiendo desarrollar su nueva vida en base a sus valores y objetivos.
Estas son algunas de las herramientas que utilizo y que me permiten ganar libertad y más calidad de vida ya que BICHIN, será mi amigo fiel hasta que me vaya hacia “un mundo mejor”.
Ahora estamos trabajando BICHIN y Yo para conseguir un pacto de no agresión, es decir… le dejo alojarse en mi cuerpo, pero no tiene que ser tan “pesado y debe de dejar de ser el centro de mi vida”.
Humor, es difícil, pero el humor, la sonrisa y la alegría de vivir no deben desaparecer de la vida de las personas que convivimos con el dolor crónico.
Si algo de lo que aquí os cuento os resulta familiar, si puedo ayudaros de alguna forma podéis contactar conmigo en el correo belenaren@activosyfelices.org
Os seguiré contando las aventuras de BICHIN y YO.
