¿Y si planeamos envejecer juntos? Los de la asociación, voluntarios, el grupo de amigos, conocidos, los del gimnasio….
Es el COHOUSING o viviendas colaborativas para los que no nos gustan mucho anglicismos (con lo rico que es nuestro idioma!)
El éxito de esta idea es sencillo:
- muchos tenemos miedo a una posible futura soledad y lo que eso conlleva,
- nuestras casas ni son accesibles ni están acondicionadas,
- tampoco queremos ir a residencias.
Las viviendas colaborativas, combinan espacios privados e independientes y zonas comunes.
Son residenciales autogestionados: cada grupo, planifica la disposición y funcionamiento de su vivienda.
Os dejo un artículo en el que explican algunos datos y otras características de las viviendas colaborativas:
Las viviendas colaborativas podrán ser de obra nueva o rehabilitación, viviendas unifamiliares o edificios de pisos…Yo incluso he visto aldeas rehabilitadas en las que cada casa era el espacio privado y en la casa grande estaba la zona común, o urbanizaciones o…no se, cada una es diferente…
En el barrio de Pinilla en León,el arquitecto Oscar Miguel Ares, hace otra propuesta (sigue este enlace). Consiste en la rehabilitación del barrio y acondicionamiento de las viviendas, de manera que los vecinos no se tengan que mudar de donde han vivido siempre y tienen sus raíces. Proporcionándoles esas condiciones de confort y accesibilidad que faltan en su entorno.
Pero sea crear o acondicionar un espacio para que las personas se sientan bien y cómodas para vivir esos años (decorado con sus cosas, claro); o rehabilitar un barrio facilitando condiciones adecuadas a los vecinos y sus viviendas, volvemos a estar hablando de lo mismo, y es proporcionar accesibilidad para todos.